Carlos Biscué, un líder comunitario indígena de 30 años, fue asesinado el 23 de junio 2019. Carlos era comunero Nasa del Resguardo Indígena de Huellas, en Caloto, Cauca.
Según la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), unos hombres armados llegaron hasta la vereda El Pilamo de López Adentro, en donde el líder indígena se encontraba en una celebración que habían organizado a su honor, y abrieron fuego contra el. Según la primera información difundida, presuntamente fue un grupo paramilitar el encargado de perpetrar la acción. Al parecer no había recibido panfletos de amenazas antes del hecho.
Carlos se desempeñaba como productor agrícola en la zona de Caloto y era uno de los miembros más activos de la comunidad Nasa del Resguardo indígena de Huellas.
En redes sociales, periodistas, políticos y varias organizaciones denunciaron el asesinato y le pidieron al Gobierno de Iván Duque que le haga frente a esta oleada de violencia contra líderes sociales y defensores de Derechos Humanos en varias zonas del país.
El Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) ha reiterado su preocupación por la aparición de panfletos en el Cauca, en los que se amenaza a las organizaciones indígenas, campesinas y sindicales y a las agrupaciones defensoras de los derechos humanos involucradas en reclamaciones de tierra y otras reivindicaciones.
En este sentido, el informe del Instituto de Estudios y Desarrollo para la Paz (Indepaz) dice que el Cauca es el departamento con más líderes sociales asesinados en el país, con más de 56, seguido de Antioquía. Además, el informe señala que durante los primeros 100 días de mandato del presidente Iván Duque se han registrado 120 asesinatos de líderes. De acuerdo con el informe, entre el 1 de enero 2018 y el 17 de noviembre 2018 han sido asesinados 226 líderes sociales y defensores de derechos humanos y de las 226 víctimas, 70 pertenecían a organizaciones nacionales campesinas, indígenas, comunidades afrodescendientes y otros movimientos.