Miguel Tapí Rito, de 70 años, era un líder indígena del pueblo Emberá Dobida. Anteriormente había sido gobernador y vocero de las comunidades indígenas de El Brazo y Bakuru Purru en Bahía Solano, Chocó.
El 3 de diciembre de 2020, Miguel se encontraba en su domicilio en el resguardo Alto del Río Valle en Bahía Solano cuando un grupo de hombres encapuchados y armados llegó a la vivienda. Se identificaron como miembros de las AGC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia) y le pidieron que los acompañara. Se dirigieron hacia el río y al no regresar después de varias horas su familia fue a buscarlo. Encontraron su cuerpo junto al río. Lo habían decapitado.
Después del asesinato, aproximadamente 900 personas de las comunidades indígenas de Posa Mansa, El Brazo, Bakuru Purru y Boroboro se mudaron del área debido a la continua amenaza de violencia.
La Procuraduría de los Derechos Humanos había emitido previamente un Alerta Temprana debido al alto nivel de riesgo para las comunidades de la zona por la presencia de grupos paramilitares como las AGC.