La noche del 2 de noviembre de 2020, el líder comunitario Rodolfo Díaz Jiménez, fue asesinado a tiros en una emboscada en el municipio de San Baltazar Loxicha en la zona de la Costa de Oaxaca.
Díaz Jiménez conducía por la comunidad cuando su automóvil fue interceptado por un grupo de hombres armados que abrieron fuego y lo mataron instantáneamente. Otros dos hombres fueron desaparecidos.
El asesinato se produjo en el contexto de una disputa electoral en curso entre autoridades locales rivales: el grupo tradicional o popular, que cuenta con el apoyo de la comunidad y el otro grupo, conocido como el «grupo constitucional», que es reconocido por el Instituto Estatal Electoral. y de Participación Ciudadana de Oaxaca (Instituto Estatal Electoral para la Participación Ciudadana), IEEPCO.
San Baltazar Loxicha se administra según normas indígenas. En las elecciones de 2019, el primer resultado fue anulado por IEEPCO, y desde entonces una parte de la comunidad se ha negado a aceptar el resultado de la segunda votación.
La segunda boleta había sido reconocida por IEEPCO, pero Díaz Jiménez era uno de los que había participado en una protesta frente a las oficinas de IEEPCO diciendo: “Queremos que la sociedad se entere de las cosas que hacen en IEEPCO porque no atender a la ley. Hacen cosas que realmente van en contra de los derechos de los pueblos indígenas.” Rodolfo Jiménez había pedido a IEEPCO que revocara la elección del alcalde Atenogenes Jiménez Martínez.
Según fuentes del grupo comunitario, tres miembros de la policía estatal habrían sido detenidos por la comunidad y el presidente del municipio, Atenogenes Jiménez Martínez, habría respondido atacando a Díaz Jiménez.
Jiménez Martínez se ha desvinculado del asesinato y ha pedido al Estado que intervenga para garantizar la paz en la comunidad.
Posteriormente, dos hombres han sido arrestados por el asesinato.
