Pamela Montenegro era una periodista y comentarista satírica 36 años, también conocida como Pamika. Tenía un canal de YouTube y una revista de noticias en línea llamada El Sillón, que fundó en 2012. Era más conocida como «La Nana Pelucas», personaje que aparece en su canal satírico de YouTube, El Sillón TV. Tanto como editora de El Sillón como en el papel de «La Nana Pelucas», Montenegro criticaba la política local en Acapulco y la región de Guerrero; con frecuencia se burlaba de los políticos de la zona. La página de Facebook de El Sillón, que Montenegro administraba con su esposo, Samuel Muñuzuri, presentó una variedad de publicaciones en los meses antes de su muerte, sobre temas como la belleza, la cultura y la política.
Según su perfil de Facebook, “La Nana” era “un personaje satírico e irreverente, que sobresalta los buenos y malos actos de los actores políticos de una manera chusca, sarcástica y bonita. Ella es viuda, coqueta y enamoradiza, además de ser la madrina y comadre de la mayoría de los personajes importantes de su estado. Es imprudente, moralista y le encanta el mitote”, se lee en la red social. Ya Pamela fue descrita por Animal Político como era “una mujer sin guiones, con carácter fuerte, inquieta, a favor de la igualdad de derechos”
El 5 de febrero de 2018, dos asaltantes no identificados mataron a Pamela en Acapulco entre las 6 de la tarde. y 7 p.m en A Todos los Santos, restaurante del cual ella y su esposo eran dueños. Según una declaración emitida el mismo día por Roberto Álvarez Heredia, un portavoz de la oficina del fiscal general del estado de Guerrero, dos atacantes no identificados ingresaron al restaurante e inmediatamente se acercaron a Pamela, quien estaba sentada con su esposo. Los asaltantes le dispararon al menos dos tiros antes de huir. El fiscal general de Guerrero, Javier Olea, declaró que Pamela fue asesinada porque había adquirido información privilegiada de una organización delincuente y que Javi Daniel Cervantes Magno, el presunto líder de una banda criminal que está activa en Acapulco, ordenó el asesinato de Pamela. Sin embargo, cuando el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ por sus siglas en inglés) quizo hacer seguimiento, un portavoz de la oficina del fiscal general del estado le dijo al CPJ que no podía confirmar que se había emitido una orden de captura contra Magno. El portavoz no ha devuelto ninguna llamada solicitando comentarios. El marido de Pamela, Samuel Muñuzuri, condenó públicamente la investigación y la declaración de Olea. “El fiscal está ejerciendo violencia de género, porque la está criminalizando…Ella sólo hacía sátira política, lo que no se vale es que hoy la querían hacer una criminal. Este es un crimen de odio, un crimen político, no tiene nada que ver con la delincuencia organizada”.
Redactado con base en textos originales del CPJ, El Universal y Animal Político