Ramón Ascué, miembro de la comunidad indígena de Cortino y defensor de la recuperación de tierras, fue perseguido y asesinado a tiros el 14 de mayo de 2018 por un grupo de motociclistas. Su activismo y participación en pro de los derechos de recuperación de tierras a través del movimiento “Liberación de la madre tierra” le costó la vida.
Ascué se encargaba de documentar en videos y fotografías la lucha del movimiento y usaba este trabajo como evidencia de las agresiones por parte de diversos actores (entre ellos policías, paramilitares y otros grupos armados) hacia la comunidad indígena.
A pesar de haber expresado el deseo de retirarse, e incluso de haber sido amenazado con su vida, Ramón, conmovido por su pasión y profundo amor a la causa, decidió continuar su labor en la expulsión de grupos armados en la región.