Carlos Mario Cañaveral, de 37 años, era miembro de la Junta de Acción Comunal en la vereda Tacuyarca, municipio de Cáceres, en Antioquia y estaba trabajando para convertirse en vicepresidente de la Junta.
El 27 de abril de 2020, Carlos recibió un disparo y resultó gravemente herido. Murió más tarde en el hospital a causa de sus heridas.
El asesino, un joven de diecisiete años identificado como Gavarra, ha sido detenido desde entonces. Se había organizado para encontrarse con Carlos en una granja y mientras charlaban lo mató a tiros. Otro hombre que estaba con Carlos resultó herido en el ataque.
Los defensores de derechos humanos están en peligro constante debido a la presencia de grupos paramilitares y muchos líderes comunitarios han tenido que abandonar la zona.
La responsabilidad del asesinato de Carlos se ha atribuido al grupo armado Los Caparros, que reclutó a Gavarra para llevarlo a cabo.
Hay una lucha en curso en la zona entre el Clan del Golfo, el ELN y elementos disidentes de las FARC por el control del narcotráfico en la región. Atacan constantemente a cualquiera que los desafíe o que se pronuncie sobre lo que está sucediendo.