Marvin Damián Castro Molina era un defensor de derechos humanos de Choluteca en el sur de Honduras que defendió su territorio contra la imposición de proyectos económicos como la minería, proyectos agroindustriales y represas hidroeléctricas.
Fue miembro de la organización ambientalista y de derechos humanos Mass-Vida. Desapareció de su casa el domingo 12 de julio de 2020 y su cuerpo fue encontrado al día siguiente.
Castro Molina era miembro de la Red Juvenil de la Asociación de Desarrollo Pepirense-Honduras, ADEPESHN, en el municipio de Pespire, Choluteca. También fue coordinador y secretario del Movimiento Ambientalista Social del Sur por la Vida, MASS-Vida.
Castro tenía 29 años y dedicaba su labor de derechos humanos a la organización y formación de redes juveniles en los departamentos de Valle y Choluteca. Fue reconocido por esta labor en la región y en los espacios de lucha social en los que participó.
Anteriormente había expresado su preocupación por su seguridad debido a su trabajo como coordinador de los movimientos juveniles de defensa ambiental en el sur del país y había presentado una denuncia ante el Sistema Nacional de Protección (SNP). Organizaciones nacionales e internacionales han pedido una investigación exhaustiva sobre el asesinato.
El asesinato se produjo en el contexto de una ola de ataques contra defensores de los derechos territoriales y ambientales en el sur del país. Más de 100 ataques de este tipo se registraron en esa zona entre enero y junio de 2020.