Sigifredo Gutiérrez, de 57 años, era presidente de la Junta de Acción Comunal del distrito de San Isidro en Morales, Cauca. Era bien conocido en la comunidad por su trabajo en numerosos proyectos para ayudar a la población local en circunstancias difíciles. Fue coordinador de un puesto de control de tráfico para evitar la propagación del coronavirus y fue un destacado organizador de los mercados de agricultores locales.
Durante la pandemia, Sigifredo logró recolectar suministros para las familias locales que no pudieron comprar alimentos debido a la pandemia.
La noche del 18 de julio de 2020 estaba en su casa cuando llegaron hombres armados y le dispararon varias veces. Los vecinos acudieron a socorrerlo de inmediato, pero murió a causa de las heridas.
Días antes del asesinato de Sigifredo, dos jóvenes, Óscar Andrés Ceballos y Johan Andrés Pardo, fueron asesinados a balazos y a fines de junio, la líder comunitaria Rosalbini Becoche fue asesinada a tiros en el retén de coronavirus.
Al parecer, los homicidios fueron perpetrados por miembros de grupos delictivos armados que se oponen a las restricciones de movimiento impuestas por los puestos de control.